Masaje
El Masaje nos ayuda a conectar con nuestra energía y con el cuerpo, a tomar conciencia de cómo está y percibir lo que necesita. Es un masaje nutritivo que nos ayuda a conectar con la confianza, la fuerza interna que nos reconecta con la fuente de vida.
A través del masaje podemos sentir también dónde están los nudos en el cuerpo, la traba, los traumas, y las represiones. Desde el masaje se ayuda a la persona a tomar conciencia de lo que le pasa emocionalmente, atravesar la dificultad, integrar espacios internos o partes de sí olvidadas, para ganar en vitalidad, fluidez corporal y energía.
Es un extraordinario complemento de las sesiones de movimiento y de terapia, ya que permite intervenir sobre las capas profundas de los músculos y articulaciones más rígidas, entrar en las corazas musculares y emocionales, ayudando así al trabajo del movimiento y de la terapia.
Si tu cuerpo está estresado, anquilosado, comprimido; si tu mente está muy activa; si te sientes emocionalmente con mucha carga, un Masaje te ayudará y tu cuerpo de lo agradecerá.
Algunos beneficios de un masaje:
- Afloja tensiones y contracturas, permite liberarse de cargas innecesarias para transformarlas en energía de vida.
- Alivia el dolor y/o malestar físico y emocional, favoreciendo la conexión cuerpo y emoción.
- Favorece la corrección de posturas corporales y problemas derivados de las tensiones musculares crónicas, de la rigidez y del acortamiento de los músculos.
- Conecta con la escucha sutil y profunda del cuerpo, con nuestras necesidades más recónditas.
- Ayuda a superar y eliminar el estrés, reduce la ansiedad, la angustia, y el insomnio.
- Permite sentir sensaciones corporales placenteras, revitalizarse, descansar, relajarse…